lunes, 20 de marzo de 2017

EL COCHECITO DE BEBÉ PINGÜINO

La elección del cochecito de Bebé Pinguino no tenía gran misterio para mi. Durante los tres años de búsqueda de embarazo me leí y empapé con todas las revistas para bebés, guías de puericultura y demás. Y casi lo tuve claro desde el principio.

El cochecito de Bebé Pingüino
Quería un cochecito Jané. Era una marca que me daba confianza porque era la misma que mi madre uso conmigo y me hacía ilusión usarla yo con mi bebé, la verdad. El modelo era otra historia. No lo tenía nada claro, ¡había tantos! Cuando empecé la búsqueda me enamoré del Solo Reverse, en concreto el modelo Chromatic. Me encantaban sus colores alegres y los dibujitos que lo acompañaban. Sin embargo, cuando me quedé embarazada ese modelo ya se había quedado (muy) atrás y aunque podía encontrarlo por internet me pareció que era mejor comprar un cochecito más actual. Estaba indecisa, en este caso, entre el Muum y el Rider. El Epic ni lo contemplaba, no sé porqué. Y en cuanto a colores mejor ni hablar. Lo que más me había gustado de Jané eran sus colores alegres y los detalles de sus dibujos, porque sí, ¡yo soy muy infantil! Pero en los últimos años los colores de sus cochecitos se habían vuelto más sobrios, menos alegres y, logicamente, habían desaparecido los dibujitos. Eran todos más comunes, más lisos y neutros.

Estando embarazada de unos 4 meses fui a una tienda de puericultura a mirar unas cosas. Vi un Muum y le pregunté al dependiente. Él, muy amable, me explicó todo, pero destacando sus desventajas. Me lo comparó con otro cochecito del que no había oído nunca hablar, el X-Lander. Físicamente no me gustaba nada, pero lo cierto es que tenía muchas prestaciones y al comprarlo te daban como grupo O uno de la marca Be-Safe. Un pack bastante bien de precio que estuve a punto de comprar. Pero preferí esperar. Sólo estaba de 4 meses, me parecía muy pronto. Él me insistió en que era un pack promocional y que se agotaría pronto, al acabar las existencias. Pero lo cierto es que no me acababa de convencer y lo que menos me gustaba es que tratase de venderme las cosas por la cara.

Los días pasaban y yo seguía pensando en mi cochecito Jané. Pero era cierto que las desventajas que me había comentado del Muum no me gustaban. Entonces, casi por descarte, opté por el Rider. Es una de las ganas más altas de Jané, algo tendría mejor, ¿no? Tengo que decir que al principio también tuve dudas de si comprar un 3 piezas o el de 2, con el Matrix Light 2. Éste me parecía más cómodo y a la larga más práctico, ya que también se ahorraba en espacio. Pero no me acababa de convender el hecho de que una misma pieza tuviera dos funciones. Por otro lado, el capazo del pack de 3 piezas me gustaba más el rígido, el Transporter 2. Pero había oído/leído que en el verano los bebés pasaban mucha calor en él. A mi me gustaba principalemente porque suelo viajar mucho (viajes largos) y el hecho de que estuviera homologado para poder llevar a mi bebé tumbado en el coche me parecía cómodo para él. Además el capazo ligero, el Micro, no me gustaba demasiado. Otra cosa que no me gustaba del Rider era su cestilla portaobjetos. Muy pequeña en comparación con el Muum. Y tampoco me parecía gran cosa el bolso. En ningún modelo. Aunque esto era lo de menos porque tenía en mente comprar una a parte.

Así que así seguía, valorando opciones. Incluso mirando otros modelos, pero no me convencían. Siempre volvía a los Jané. Incluso encontré uno, Muum, de edición especial. Precioso. Me encantaba. De colorines y dibujos. Pero el color tampoco me convencía del todo. Pensé que quizás podría esperar dos o tres meses a ver la nueva colección fisicamente. Había visto por la web algunos modelos nuevos y los colores mejoraban, eran más alegres.

Un día, paseando, vi en el escaparate de una tienda de bebés un cochecito Jané de un verde precioso que jamás había visto. No entré. Tuve que irme a hacer cosas. Pero todo el rato tuve lo tuve en mente así que cuando terminé fui a la tienda, entre y... ¡decepción! Sí, el color era precioso pero no era un cochecito sino una silla de paseo, Nanuq. Habia dos o tres cochecitos Jané pero no me convencían. Sin embargo, por casualidad, casi sin querer, cuando ya me iba... ¡lo vi! Era él! Era exactamente lo que yo buscaba. Era, sencillamente, ¡perfecto!


El cochecito de Bebé Pingüino

No era un Muum ni un Rider, sino un Epic. Sí, ese modelo que yo ni siquiera había contemplado. Era de varios colores: marrón, beige, naranja, blanco... porque era una edición especial, y ¡tenía dibujos! Un conejito y varias estrellas. Era un tres piezas, y el capazo no era rígido pero era más redondito y pequeño que el Micro, y me parecía precioso. Además el bolso que traía era mucho más grande que el de los Jané normales, por lo que no tenía que comprar ninguno extra. La chica me explicó su funcionamiento y me encantó. Ya me dijo que era una gama intermedia entre Rider y Muum. No lo dudé, lo reservé en aquel momento. Fue muy pronto, ¡estaba de 5 meses! Pero fue un flechazo, amor a primera vista y no podía pasarlo por alto. Además, tuve la suerte de que en Bebitus, encontré el saco de invierno a juego y muy rebajado, ¡así que me venía genial! 

El cochecito de Bebé Pingüino

Mi experiencia con él, 12 meses después.

Después de usarlo durante varios meses puedo decir que estoy feliz y que mi experiencia con él ha sido genial. Es cómodo y práctico, no pesa demasiado y no es un armatoste.

También reconozco que soy más de portear y que para pequeños paseos prefiero llevar la mochila.

El capazo lo usé justo 3 meses. Bebé Pingüino era un bebé muy grande y casi no cabía. También tengo que decir que al ser un modelo especial el capazo era más pequeño que el de las ediciones normales, pero además, mi bebé era muy curioso y siempre quería ir sentado viéndolo todo.

El grupo 0/0+ también nos quedó pequeño en seguida. A los 4 meses ya no aguanté más y compré una silla de coche más grande y duradera. Además, el sistema de enganche del coche no me gustaba. El tema del cinturón se me hacía muy incómodo y más de una vez, sin querer, le hice daño al meterlo y sacarlo de ahí.

La silla aún la sigo usando. Sin problema. Hemos ido por campo, playa y ciudad. Todo sobre ruedas, nunca mejor dicho. A la hora de plegarlo, mi maletero es muy pequeño pero le quito las ruedas y entra sin problemas. Hace un par de meses tuve una incidencia y es que descubrí que a una de las ruedas le faltaba una pieza. Creo que venía así de fábrica porque era una pieza que venía encajada a presión y no se podía quitar fácilmente. No hubo problemas. Fui a la tienda, contactaron con la casa Jané y en una semana tenía la pieza nueva.

Mi experiencia: Sobresaliente. Sin duda, volvería a repetir.


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¿Qué cochecito escogiste tú? ¿Fue una decisión acertada?

2 comentarios:

  1. El cochecito es una chulada, y hace conjunto con el saco para silla de paseo, que compramos la semana pasada, así que sin duda buscaré uno asi.

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